Presentando el boletín de Diseño Activista y un intento de guía imperfecta de supervivencia.
Calle de juego, Peatoniñas en la colonia San Francisco Culhuacán, Ciudad de México, 2016. Foto cortesía del LabCDMX.
El estado de las cosas
Hace casi siete meses que se identificó la existencia del nuevo virus y hace cuatro que la Organización Mundial de la Salud declaró la pandemia de COVID-19; y aunque mucho ha sido escrito desde entonces, podemos estar de acuerdo en que hoy impera un sentido exacerbado de incertidumbre. Sin merecerlo, muchas personas han perdido sus empleos y, con ellos, cualquier liviana percepción de estabilidad. Mucho peor es pensar en quienes se nos han ido demasiado temprano y sin la posibilidad de despedirles.
Seguimos sin resolver, de forma satisfactoria, el dilema de cómo mantener los niveles de contagio dentro de los límites de nuestra presente infraestructura médica y, al mismo tiempo, evitar que las circunstancias terminen por privar a un número creciente de familias de los medios básicos de subsistencia, ni hablar de una vida digna.
“La pandemia ha develado verdades incómodas que ya no debemos ignorar [...] Hoy podemos ver con claridad que los sistemas imperantes que dominan la vida humana a nivel global perpetúan condiciones generalizadas de extrema vulnerabilidad y asimetría.”
La pandemia ha develado verdades incómodas que ya no debemos ignorar, incluida la incapacidad de las estructuras institucionales nacionales e internacionales para atender una emergencia de esta magnitud y cómo, a nivel global, los sistemas imperantes perpetúan condiciones generalizadas de extrema vulnerabilidad y asimetría. No es una casualidad que justo ahora el movimiento por los derechos de los afroamericanos estadounidenses cobre tal ímpetu. Es decir, se demuestra que el sistema hegemónico y homogenizante no es ni tan efectivo ni tan sólido como nos lo habían planteado. ¿Por qué habría de permanecer inmutable?
Una imagen tomada con un microscopio electrónico de transmisión (TEM, por sus siglas en inglés) subraya el envoltorio esférico de un virión del síndrome coronavirus del Medio Oriente (MERS-CoV). Imagen original del departamento de Gobierno de los Estados Unidos de América: Public Health Image Library, Centers for Disease Control and Prevention.
La reflexión y la imperfección
En el grupo Diseño Activista (MX) determinamos que lo que nos compete es aprovechar la crisis para identificar y activar oportunidades potenciales de cambio benéfico sostenido. Nos parece pertinente implementar estrategias que promuevan la colaboración y la vinculación. Estas estrategias pueden ser acciones de escala minúscula, pero las concebimos de gran impacto en tanto allanen necesidades comunes, habiliten la cooperación extendida y generen autonomías.
Potencialmente, y si todo sale medianamente bien, estas entregas (más o menos) mensuales conformarán una especie de guía imperfecta de supervivencia,un compendio de miradas diversas y momentos luminosos que nos permitan retener no sólo el conocimiento, sino también la dignidad y la belleza, conceptos que nos parecen vitales llegada la peor situación.
“Este esfuerzo busca aprovechar la crisis para visibilizar las atrocidades normalizadas y crear estrategias para no regresar a ellas. El estado de emergencia es una pausa obligada que nos empuja a salir de la zona de confort y nos invita a observar el lugar en el que estamos parados”
Declaramos que esta guía será imperfecta porque no hay manera de incluir todas las voces o allanar todos lo temas. En esa imperfección encontramos la posibilidad de incluir visiones y conocimientos que nos permitan imaginar y construir futuros más allá de la sostenibilidad y la regeneración. Sí, nos parece vital el dominio de conocimientos prácticos básicos —que serán parte nodal de estas entregas— pero encontramos indispensable también nutrir el corazón y el intelecto.
De modo que los boletines que conformarán la guía imperfecta abarcarán gran diversidad de temas y perspectivas desde las experiencias de los integrantes del grupo Diseño Activista y su red de colaboradores, no todas tan flemáticas y serias como este texto, afortunadamente. En cada entrega, incluiremos también un par de ligas relevantes a proyectos, textos y conocimientos que ahonden en el tema abordado y la perspectiva activista.
Taller de cocreación en la UMA impartido por Diego Alatorre, 2018. Foto cortesía del mismo.
Conclusiones colaborativas
Este esfuerzo busca aprovechar la crisis para visibilizar las atrocidades normalizadas y crear estrategias para no regresar a ellas. El estado de emergencia es una pausa obligada que nos empuja a salir de la zona de confort y nos invita a observar el lugar en el que estamos parados, nos habilita para dudar y cuestionarnos todo, especialmente a nosotros mismos y, en última instancia, nos permite (por fin) plantearnos otras posibilidades.
Las acciones colaborativas solidarias, como nuestra guía imperfecta, pueden representar la semilla para generar pequeñas autonomías que suplan las estructuras ineficientes o secuestradas. Este es un imperfecto llamado a acompañarnos y activarnos juntos en este vital punto de la historia humana, esperamos encontrarte en el camino.
Con mucho cariño, toda nuestra ingenuidad y esperanza, Grupo Diseño Activista
Inspiración
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Súper clara visualización de la criminal acumulación de capital y su absurda distribución.
¡Siguiente entrega a cargo de Isla!
ISLA busca generar y organizar comunidades completamente autosustentables, modernas y replicables que permitan que el ser humano pueda libremente dedicar la mayor parte de su tiempo a proyectos personales cuyo fin no necesariamente tenga que ser el beneficio económico.
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